La declaración de que España opera como un «paraíso fiscal» para los millonarios de Centroamérica ha captado interés, aunque no tiene sustento. Este artículo examina por qué España no se ajusta a las características de un paraíso fiscal y revisa las motivaciones para establecer holdings en este territorio.
España no se ajusta a las características de un paraíso fiscal
Los paraísos fiscales se definen por tener impuestos reducidos o inexistentes, una falta de transparencia y una protección extremadamente elevada de la privacidad financiera. No obstante, España se aparta notablemente de estas características.
Altos impuestos y un sistema fiscal sólido
A diferencia de los paraísos fiscales, España posee un sistema tributario sólido que abarca impuestos sobre la renta, sociedades, patrimonio y sucesiones. Las tasas impositivas en España son significativamente elevadas en comparación con aquellos lugares que realmente tienen políticas fiscales muy permisivas.
Compromiso con la transparencia financiera
España es un participante activo en los acuerdos internacionales para el intercambio de datos fiscales, siguiendo las regulaciones tanto de la Unión Europea (UE) como de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Este nivel de transparencia desalienta la evasión de impuestos y promueve la colaboración internacional.
Las autoridades tienen acceso a la información financiera
Las autoridades tributarias en España tienen la capacidad de acceder a los datos financieros tanto de residentes como de no residentes, lo cual contrasta con la falta de transparencia típica de los paraísos fiscales.
Estricta regulación en España
La legislación fiscal en España es estricta y cumple con los estándares internacionales. Algunas de las medidas más notables incluyen:
- Directiva Antievasión Fiscal (ATAD): instaurada por la UE, garantiza que tanto las empresas como los individuos cumplan con sus deberes tributarios.
- Intercambio Automático de Información (CRS): fomenta la transparencia mediante el intercambio de información fiscal entre naciones.
- Inexistencia de ventajas fiscales excesivas para extranjeros: a diferencia de otras jurisdicciones, España no ofrece incentivos fiscales significativos para atraer a millonarios a establecerse en su territorio.
Este marco regulador riguroso complica que los millonarios centroamericanos empleen a España como un santuario fiscal.
La situación de las holdings en España
Un holding es una estructura legal diseñada para gestionar inversiones y actividades en diversas jurisdicciones. La formación de holdings en España se relaciona más con estrategias de expansión y protección de inversiones que con la simple obtención de ventajas fiscales.
Esta estrategia permite a las empresas acceder a mercados con mayor liquidez y un desarrollo más avanzado.
Además, optar por esta estrategia no afecta en ningún punto el riguroso cumplimiento de todas las obligaciones legales, regulatorias, laborales y tributarias de las empresas en sus respectivos países.
Beneficios normativos para inversores
España proporciona un entorno regulatorio atractivo para compañías internacionales. No obstante, estas ventajas no se traducen en beneficios fiscales desmesurados. Por ejemplo, los ingresos no gravados en su país de origen están sujetos a un impuesto del 25% en España, y este porcentaje puede incrementarse según el tipo de ingreso.
Impuestos extra para empresas de Centroamérica
Para las empresas de Guatemala, Honduras y Nicaragua, la ausencia de un acuerdo para evitar la doble tributación con España resulta en un costo extra de 1.25% sobre los impuestos ya pagados en el país de origen. Esta situación subraya que España no se puede considerar un paraíso fiscal, ya que en lugar de disminuirse, las obligaciones fiscales aumentan.
Destinos más atractivos para millonarios
En lugar de España, los millonarios centroamericanos prefieren jurisdicciones con regulaciones fiscales más laxas.
Algunas de estas en América incluyen:
- Barbados: conocido por su reducida carga fiscal y acuerdos de confidencialidad.
- Panamá: proporciona incentivos fiscales ventajosos para extranjeros y promueve la protección de la privacidad financiera.
Algunas de ellas en Europa son:
- Irlanda: Con un impuesto de sociedades del 12,5%, atrae a grandes corporaciones multinacionales.
- Hungría: Ofrece la tasa impositiva de sociedades más baja de Europa, situada en el 9%.
- Chipre: Beneficiado por su impuesto del 12,5% y acuerdos de doble imposición.
- Luxemburgo: Reconocido por sus regímenes especiales para empresas globales.
- Países Bajos: Destacado por su entorno fiscal favorable para holdings y convenios internacionales.
Aunque España puede ser un destino atractivo para inversiones o residencia, su sistema fiscal no permite la optimización tributaria que los millonarios buscan en jurisdicciones como las mencionadas.
¿Por qué España no se considera un paraíso fiscal?
A pesar de que algunos extranjeros con altas fortunas invierten en bienes raíces en España, esto no transforma al país en un paraíso fiscal. Las elevadas tasas impositivas y la rigurosa regulación implican que las propiedades adquiridas en ciudades como Madrid o Barcelona no aportan una optimización fiscal considerable.
Para las empresas centroamericanas, establecer un holding en España se debe a estrategias legítimas de expansión y no a la evasión fiscal.
España no constituye un paraíso fiscal para los millonarios centroamericanos. Sus elevados impuestos, su estricta regulación y su compromiso con la transparencia fiscal refutan este mito. Además, la formación de holdings por parte de empresas responde a estrategias legítimas de crecimiento y protección de inversiones, no a la evasión fiscal. La decisión de establecerse en España se basa en un entorno normativo favorable, pero también implica una carga tributaria considerable, desmitificando así la noción de que el país es un refugio fiscal para millonarios.