El candidato republicano Donald Trump se declaró este miércoles ganador de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, con un total provisional de 277 votos electorales frente a los 224 de su rival demócrata, Kamala Harris, según las proyecciones de los principales medios de comunicación del país.
Durante un mitin en Palm Beach, Florida, Trump atribuyó su victoria a los buenos resultados parciales y al apoyo del voto popular. Se trata de un hecho histórico, pues es la primera vez en más de un siglo que un expresidente regresa al cargo tras perder una elección anterior, además de ser el primer presidente en asumir el cargo tras ser condenado por un delito.
El Colegio Electoral, formado por 538 delegados, elige al presidente en función de la población de cada estado. El candidato que gana un estado, incluso por un solo voto, se lleva todos los delegados de ese estado, excepto Nebraska y Maine. Para ganar se necesitan al menos 270 votos.
En su discurso de menos de media hora en el centro de convenciones de Palm Beach, acompañado de su familia y responsables de campaña, Trump aseguró que gobernará para todos y que, «juntos», harán de Estados Unidos un país mejor. “El éxito nos unirá y comenzaremos poniendo a Estados Unidos en primer lugar. “No os decepcionaré”, prometió.
Trump agradeció a su familia y a los estadounidenses y les pidió que dejen atrás las divisiones de los últimos años.
Por su parte, una portavoz de Kamala Harris indicó que aún quedan votos por contar, sugiriendo que la carrera no ha terminado. Trump celebró victorias en estados clave como Carolina del Norte, Georgia, Pensilvania y Wisconsin, y afirmó que los republicanos han recuperado la mayoría en el Senado.
Antes de finalizar el conteo, Harris decidió posponer hasta este miércoles su discurso previsto para el día de las elecciones, según informó su campaña.